
El cantante mexicano Alejandro Fernández negó hoy tener problemas de alcoholismo y aseguró que no le importan los comentarios sobre el incidente en que casi vomitó en un concierto a raíz de que le invitaran a un vaso de “tequila rosa”.
En declaraciones publicadas hoy por el diario “Reforma”, Fernández dijo que “siempre sobra gente que te quiere molestar y hacer daño”, y añadió que lo que sucedió es que tomaba coñac cuando le ofrecieron la bebida color rosa, que le cayó mal.